LA LUZ DEL MUNDO
18 de noviembre, 2016
Dios en su misericordia y gracia creó el mundo con miras a redimirlo.
Y dijo Dios: “Sea la luz”; y fue la luz (Génesis 1:3).
“Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida” (Juan 8:12).
Él –el que creó la luz (Juan 1:1-3), descendió del cielo, nació de una virgen, fue rechazado, crucificado y resucitado– es la Luz del mundo. Él es el mismo resplandor de la gloria de Dios (Hebreos 1:1-3).
La imagen de arriba es de Amu; él es de la tribu de YIFKI. Los misioneros han compartido el Evangelio con su tribu y están trabajando duro y diligentemente para terminar la traducción de la Biblia. “Amu sólo tiene una linterna para ver, sin embargo, su amor por la Palabra de Dios brilla tan fuerte como el sol”. –Cita y foto de David Rimestad
Por la gracia de Cristo, Amu ya no está en tinieblas. Está contemplando la belleza y la gloria del Salvador. Sin embargo, todavía hay 6.000 grupos étnicos que no están andando en la luz. Son esclavos de sus corazones pecaminosos y están siguiendo la insensata y necia senda oscura de sus antepasados porque no han escuchado ni han visto la Luz del mundo. ¿Cómo pueden oír si no se les dice? ¿Cómo se les puede decir si no vamos?
¿Te unirás a nosotros para entrar en esta temporada navideña con acciones de gracias, cantando alabanzas mientras nos deleitamos en la celebridad, el resplandor y la bondad de nuestro Hacedor, que Él tan generosamente nos prodiga? Que Su unción de gracia nos haga arder más intensamente de Su esplendor con nuestros hermanos, madres, hermanas, padres, vecinos, y con los incrédulos quebrantados de corazón a lo largo de Su creación ¡para que puedan dar gracias a Jesucristo y bendecir Su nombre!
¿Cómo puedes ser luz, incluso hasta los fines de la tierra? Compartiendo al Cristo crucificado y resucitado por los pecadores de toda tribu, lengua y nación. Dios está revelando lo que una vez estuvo oculto –el misterio del Evangelio- a través de Su iglesia. Muchos no saben que 6.000 grupos étnicos nunca han oído hablar del Evangelio ni tienen una iglesia. Muchos tampoco han escuchado cómo pueden participar en esta obra eterna ya sea yendo, dando y/u orando.
¿Informarás a otros? ¿Darás gracias? ¿Orarás por aquellos que nos han precedido y que están trabajando actualmente con miras a compartir el Evangelio, el discipulado y la plantación de iglesias?
¡Alabado sea Dios por tu luz que brilla dentro de tu familia, tu comunidad, y hasta los fines de la tierra!
SU GRACIA BRILLA
8 de diciembre, 2016
Reflexionando en la fidelidad de Dios el año pasado, alabándolo por hacer crecer mi (Brandy) fe y profundizar mi amor por las tribus no alcanzadas de Papúa Nueva Guinea que están en tinieblas.
Fue tan rápido como un dedo apagando el interruptor de luz. Estaba en una habitación luminosa, llena de esperanza y risa, y en un instante se volvió horriblemente oscura, dejándome con sentimientos de desesperanza, miedo y desesperación. Cuando somos infieles, ¡Él permanece fiel porque no puede negarse a Sí mismo!
A principios de este año, mi cuerpo comenzó a experimentar muchos cambios. Tenía un desequilibrio hormonal muy marcado durante la semana de mi ciclo menstrual. No me levantaba de la cama, mis lágrimas eran mi comida, escuchaba los susurros de Satanás: “¿Dónde está tu Dios?” Me sentaba en la bañera, sintiéndome como si estuviera en un océano y todas las olas pasaran sobre mí. Recuerdo que una noche levanté mis brazos con desesperación, suplicando que me abrazara para restaurar mi esperanza y llenarme de Su gozo.
La desesperanza crecía, y con ella la ira comenzó a estar más presente. Nunca hubiera pensado que llegaría a atacar a mi amoroso esposo, pero un monstruo se estaba desarrollando en mí y en un momento se desató. Fue entonces que busqué ayuda, orando para que nuestra familia no fuera dividida. Estaba avergonzada y temerosa de que el Estado nos quitara nuestros hijos.
Los médicos de atención primaria sugirieron antidepresivos, pero yo solo experimentaba este cambio de esperanza a desesperanza una semana de cada mes. Sentía que era como poner paños de agua tibia sobre el problema.
Luego acudí a un obstetra y consideramos opciones de control natal que me darían las hormonas necesarias. Hice esto durante unos meses y me ayudó, pero empecé a investigar sobre remedios naturales por un par de razones, y me complace informar que he estado fuera de Control Natal durante unos seis meses y estoy tomando en su lugar la raíz de maca que ha equilibrado mis hormonas.
He informado sobre mis luchas, ahora me gustaría hablar de la gloria.
Estaba desilusionada, pensando que Aquel en quien más disfrutaba y me deleitaba, había desaparecido. Satanás susurraba y se reía de mí: “¿Dónde está tu Dios ahora?” ¡Fue un tormento angustioso e insoportable sentir como si mi Dios se hubiera ido! Mi alma tenía sed de Él; pero la verdad es que, aunque Jesús parecía ausente, no lo estaba. Él nos promete en Mateo 28:20: “He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”.
Esas olas: Suyas. Mi hundimiento: una gracia. En Su amor y Su soberanía, ¡Él está haciendo que todas las cosas obren para el bien de Sus hijos y para Su gloria!
Él me dio una visión y una prueba de las tinieblas en que los incrédulos vagan sin esperanza, y la aterradora impresión que me deja lo que significa estar sin Él en esta vida y después.
¡Él me dio una alabanza más resonante de Su gracia salvadora!
Me dio una adoración más profunda y la urgencia de proclamar el Evangelio para que aquellos que están en tinieblas experimenten la Luz del mundo, y los que tienen sed beban de la Fuente que satisface sin disminuir. Para que se unan a nosotros en adoración a nuestro Salvador.
Tuve que recordar que debo esperar en el Dios de nuestra salvación, recordar Su fidelidad y Su esquema de seguridad.
Un fragmento de la canción “Satisfecho en Ti” de Sing Team [Equipo Cantar]:
Así que es hora de levantar la frente
Y recordar tiempos mejores
Cuando me encantaba adorarte y aprender Tus caminos
Cantando las más dulces canciones de alabanza
Permite que mis suspiros den lugar a canciones que canten de Tu fidelidad
Deja que mi dolor revele Tu gloria como mi único descanso verdadero
Permite que mis pérdidas me muestren que lo único que realmente tengo eres Tú
Así que cuando me esté ahogando en el mar
Y todas Tus olas y Tus ondas choquen contra mí
Recordaré Tu esquema de seguridad
Tú eres el que hizo las olas
Y Tu Hijo salió para sufrir en mi lugar
Y para mostrarme que estoy seguro
El Salmo al que me aferraba: Salmo 42.
Oro para que al compartir mi historia, tú también recuerdes la fidelidad de Dios y Su esquema de seguridad. Que entres al próximo año lleno de esperanza, amor y gozo; que en tu corazón brille Su GRACIA.
GOZO
16 de diciembre, 2016
Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo. Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer (Juan 1:14-18).
Cuando era niña, esperaba con ansiedad e impaciencia que llegara el Día de Navidad. Había mucha emoción para abrir los paquetes y deleitarse con los regalos. Estoy segura que mis pensamientos eran los de la cartelera de Lexus que vi anoche y que sugería: ‘gozo para mi mundo’.
Todavía soy esa niña, pero en lugar de un regalo bajo un árbol, estoy esperando el día de pasar rauda a través de la línea de meta del desarrollo de socios de ministerio para que podamos estar en PNG sirviendo -ayudando a llevar gozo a las etnias no alcanzadas.
Desarrollar un grupo de socios de ministerio ha sido más difícil de lo que imaginábamos y ha requerido más tiempo de lo esperado. Sin embargo, el Padre está revelando la dulzura en nuestra espera. El Espíritu está profundizando nuestra intimidad con Jesús y con nuestros socios de ministerio. Él está aumentando nuestra fe en el Salvador, quien reina, y está desarrollando nuestra confianza en el equipo que está respaldándonos.
Estamos muy agradecidos con nuestros socios de ministerio que nos envían palabras de aliento, nos preguntan cómo pueden orar específicamente por nosotros y, por otro lado, nos dan el privilegio de participar en sus vidas y orar por ellos.
La semana pasada estábamos hablando con un pastor local y cuando nuestra visita se estaba acercando al final, nos preguntó cómo podía orar por nosotros.
Sin vacilar, le respondí: “Que tengamos gozo en la espera”.
Con qué facilidad mi enfoque de contemplar al Hijo de Dios que vino en carne, lleno de gracia y de verdad, habitó entre nosotros, y fue colgado en la cruz en lugar de los pecadores, cambia a apoyar a aquellos que llevan almas perdidas a Cristo; este no es un deseo terrible, todo lo contrario. Estoy agradecida por la gracia de Jesús que nos llena con esta urgencia de ir, pero cuando el servicio se convierte en el centro de atención entonces he caído en un pecado grave.
En esos tiempos de transición, mi gozo comienza a disiparse y en su lugar mi corazón y mi mente empiezan a llenarse con ansiedad y preocupación, preguntándose ¿cuánto tiempo más?
Jesús vino en carne, vivió una vida perfecta, fue crucificado y resucitado para que, por la gracia de Dios, por medio de la fe en Jesús pudiéramos ser reconciliados con Dios y estar llenos del gozo de estar en Su presencia ahora y eternamente.
Jonathan Edwards dijo: “El disfrute de Dios es la única felicidad que puede satisfacer nuestras almas”.
Esta es la esencia misma de por qué vamos a ir a PNG, para que estos grupos étnicos no alcanzados adoren para siempre al Dios de todo gozo, y el único camino es a través de Jesús.
Él nos dice esto en Juan 14:6 “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”.
¿Orarás por nosotros para que tengamos gozo continuo en la espera, y para que nuestros corazones y nuestras mentes no se desvíen del Evangelio?
Estamos orando para que nuestros socios de ministerio, todos los que están leyendo estas líneas, sean llenos de gozo y alegría, regocijándose por el nacimiento de nuestro Salvador (Lucas 1:14).
¡Feliz Navidad y gozo al mundo!
Deja un comentario